Este sábado, luego de que Almagro venciera a Estudiantes de Buenos Aires por 1 a 0 durante la fecha 24 de la Primera Nacional, un furioso enfrentamiento se desató entre barrabravas y concluyó con la muerte de una mujer de 36 años.

La joven fue alcanzada por uno de los disparos, mientras que otros dos hombres también tuvieron que ser hospitalizados por lesiones provocadas por un arma de fuego.

El enfrentamiento armado ocurrió el sábado por la tarde en las inmediaciones del Estadio de Almagro, ubicado en Villa Los Rusos, en el partido de Tres de Febrero, en Asunción y Padre Elisalde, a unas 15 cuadras del recinto.

Fuentes del caso indicaron a Infobae que, cerca de las 18, arribaron al lugar algunas personas de la hinchada Almagro, en una moto de color rojo; un VW Gol trend de color gris topo y un Citroen C3 negro con techo de vidrio. En ese momento, los conductores bajan de los vehículos y comienzan a efectuar disparos de arma de fuego. Aleyda Camacho Huarachi fue alcanzada por uno de los proyectiles cuando regresaba a su casa. Aunque fue trasladada de urgencia al Hospital Carrillo, llegó muerta al centro médico.

Según la información, otros dos hombres resultaron heridos. Uno de ellos, identificado como Gabriel Yannino, de 38 años, fue hospitalizado en estado crítico. Al respecto, en una historia de Instagram, la cuenta de infantiles de Almagro publicó: “Queremos enviar nuestras fuerzas a la familia de Gabriel Yannino, padre de uno de nuestros chicos que resultó gravemente herido en un evento que debería tratarse de fútbol y diversión, no de violencia. Rezamos y los invitamos a pedir por su pronta mejora”.

En tanto, un segundo herido, 50 años, recibió un disparo en una pierna y estaría fuera de peligro.

La causa quedó en manos de la Fiscalía de Turno de Tres Febrero, que ordenó la realización de una serie de pericias en el área de los hechos, con el fin de encontrar pruebas que ayudaran a dar con el paradero de los presuntos responsables. Asimismo, el fiscal a cargo de la investigación solicitó un análisis de las cámaras de seguridad y la realización de entrevistas a los testigos del tiroteo.

Mientras todo esto ocurrió, se suma a una larga ola de robos centrados especialmente en Caseros. Muchos vecinos y vecinas de la zona hablan de “Zona liberada” y le piden al intendente Diego Valenzuela que tome cartas en el asuntos.

Desde el municipio suelen responder que hacen todo lo que tienen a su alcance, aunque muchos crítican que la gestión de seguridad deja mucho que desear ya que acusarian al intendente de no preocuparse demasiado del tema porque estaría ya pensando en su posible candidatura a gobernador de la PBA.

*Con información: https://www.infoveloz.com/