El 24 de diciembre de 2002 falleció en Buenos Aires la actriz y cantante argentina Tita Merello, figura emblemática del tango y el cine nacional, a los 98 años. Conocida por su voz rasposa y frases como «Se dice de mí», Merello encarnó el espíritu porteño en películas como «La gloria de mamá» y shows en el Luna Park. Su partida coincidió con la Nochebuena, cerrando una era dorada del espectáculo rioplatense.
Nacida el 11 de octubre de 1904 en el Bajo como Laura Ana Merello, ascendió desde el teatro de revistas hasta la cima del estrellato, colaborando con Libertad Lamarque y Enrique Santos Discépolo. En 2002, su muerte por causas naturales generó duelo masivo: el gobierno decretó duelo y su velatorio en la Rotonda de la Recoleta atrajo a miles, reflejando su arraigo popular pese a una vida marcada por pobreza inicial y romances turbulentos.
En Argentina, su legado perdura en el Día del Tango y reediciones de films; para Notigital, esta efeméride resuena en la cultura local, vinculando historia del espectáculo con tradiciones navideñas porteñas. Contemporáneos como Osvaldo Bayer, fallecido el mismo día en 2018, refuerzan el 24 de diciembre como fecha de pérdidas culturales clave. Merello simboliza la garra argentina, inspirando nuevas generaciones en un 2025 de recuperación post-pandemia.
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