TEDEUM DEL 25 DE MAYO EN LA PLATA: EL ARZOBISPO CARRARA LLAMÓ A LA DIRIGENCIA A «CUIDAR LA DIGNIDAD DEL PUEBLO» FRENTE A KICILLOF Y AUTORIDADES BONAERENSES
La Catedral de La Plata fue este 25 de mayo el epicentro de la tradicional ceremonia del Tedeum, presidida por el arzobispo Gustavo Oscar Carrara, en conmemoración del 215° aniversario de la Revolución de Mayo y la formación del primer gobierno patrio argentino.
El evento contó con la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, la vicegobernadora Verónica Magario, el intendente platense Julio Alak, ministros, legisladores, concejales, funcionarios municipales y representantes de distintos credos, junto a vecinos de la ciudad.
Un mensaje de fuerte contenido social y político
Durante la homilía, monseñor Carrara dirigió un mensaje contundente a la dirigencia política, social y religiosa, instándolos a trabajar “por la dignidad de las personas” y a poner el poder “al servicio del bien común, especialmente de aquellos que están más heridos en su dignidad”. “Servir es fundamentalmente cuidar con ternura y defender con firmeza la fragilidad de nuestro pueblo”, expresó el arzobispo, quien además recordó las enseñanzas de Jesús y el legado del Papa Francisco sobre el valor de la solidaridad y el amor al prójimo.
Carrara advirtió sobre la importancia de buscar la felicidad del pueblo como antídoto contra la corrupción: “El poder es para servir y no para servirse de los demás. Todos los que tenemos un poder, tenemos que ponernos al servicio del bien común. La dignidad que tenemos nos da derecho a ser felices, pero los seres humanos no podemos alcanzar la felicidad solos. Necesitamos de vínculos y relaciones”.
El arzobispo también destacó el rol de la familia como “primer hospital cercano y primera escuela de los niños”, y subrayó la necesidad de rehabilitar la política para que vuelva a ocuparse del bien común y la organización social, en línea con el espíritu de la Constitución Nacional.
Presencia política y repercusiones
El gobernador Axel Kicillof celebró el mensaje del arzobispo y, al finalizar la ceremonia, remarcó ante la prensa la importancia de “apostar por una patria más igualitaria” y de “seguir acompañando al pueblo, sobre todo a quienes más lo necesitan”. Kicillof valoró el Tedeum como un gesto de unidad y reflexión en tiempos difíciles, que invita a no resignarse y a construir un futuro mejor desde el presente.
Por su parte, el intendente Julio Alak resaltó el valor de la unidad y la lucha por la libertad, afirmando que la ciudad de La Plata sigue trabajando por una sociedad más justa y equitativa, inspirada en los ideales de los próceres de Mayo.
La ceremonia, cargada de simbolismo y participación ciudadana, se realizó en la Catedral de la Inmaculada Concepción, ubicada en calle 14 entre 51 y 53, y reunió a autoridades provinciales y municipales, representantes de distintas instituciones y vecinos que se acercaron a celebrar la fecha patria.
Un llamado a la esperanza y al bien común
El Tedeum de este 25 de Mayo en La Plata dejó como eje central el llamado a la dirigencia a priorizar la dignidad y la felicidad del pueblo, a través del servicio, la solidaridad y la defensa de los más vulnerables, en un contexto social y político desafiante para la Argentina actual.
Con NA.
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