Este miércoles en el estadio Centenario de Chaco, se enfrentaron por los octavos de la Copa Argentina Defensa y Justicia vs River Plate.
El cotejo se inició a todo ritmo, con Defensa planteando una disposición de 3-5-2 (o 3-4-3) para buscar lastimar a espaldas de los laterales del Millonario, que pasan mucho al ataque. En los primeros compases amagó con imponerse, pero la jerarquía de los dirigidos por Gallardo marcaron diferencia a los tres minutos de juego. De la Cruz presionó a Gutiérrez y robó, Quintero filtró para Solari, la defensa del Halcón no hizo pie y el ex Colo Colo definió cruzando para rubricar el 1-0.
Pero con el correr de los minutos, Defensa creció, con despliegue físico y movilidad. A los 21′, Duarte, de media distancia, asustó a Armani. A los 23′, Gabriel Alanís llegó a fondo por derecha, sacó el centro rasante y Herrera cruzó providencialmente.
No obstante, River exprimió cada facilidad. Y a los 29′ amplió la ventaja. Casco simplificó su intervención en un solo movimiento y abrió para De la Cruz, quien desbordó, cedió al centro y Beltrán, aún con un remate imperfecto, batió a Unsain: 2-0.
El inicio del segundo tiempo ofreció una sorpresa: la salida de Franco Armani, lesionado (su lugar lo tomó Ezequiel Centurión). En River no impactó: saltó al césped con la intención de evitar la zozobra. A los 20 segundos ya había legado a fondo, con la doble tapada de Unsain a Solari y Quintero.
A los dos minutos, Juanfer, de tiro libre, obligó a la atajada del portero. Y a los tres llegó el 3-0: Beltrán corrió 35 metros, cedió para Solari, y el punta cordobés resolvió con calidad. La contundencia y el peso de tres cuartos en adelante, la diferencia que subrayó la Banda en Resistencia. A pesar de la sensación de llave definida, Defensa mostró vergüenza deportiva y continuó buscando, al punto de que inquietó con el juego aéreo y con la entrada de Alanis que rechazó Centurión.