La reunión giró en torno al escenario que se abre por la reforma laboral, las expectativas para el 2026 y el estado de alerta permanente ante la avanzada del gobierno de Milei contra los derechos de la clase trabajadora.
Las comisiones ejecutivas de la CTA Autónoma y de la CTA de los Trabajadores, encabezadas por sus secretarios generales, Hugo “Cachorro” Godoy y Hugo Yasky, mantuvieron esta tarde una importante reunión con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, para analizar el grave escenario que se abre a partir de la presentación de diversos proyectos de ley impulsados por el gobierno de Milei, entre ellos la reforma laboral.
De concretarse, esta iniciativa implicaría un cambio estructural de enorme gravedad en perjuicio de la clase trabajadora, los sectores populares y las organizaciones sindicales. Se trata de una ofensiva que apunta directamente a debilitar y destruir las herramientas de organización colectiva del pueblo trabajador.
Frente a este escenario, se coincidió en la necesidad de aunar esfuerzos para seguir esclareciendo los efectos devastadores de estos proyectos y avanzar en la construcción de acciones de intervención política e institucional, tanto en el Congreso Nacional –articulando con los gobernadores– como en las calles, donde la participación popular sigue siendo la clave para revertir este rumbo negativo que padece el pueblo argentino.
También se analizó en la reunión que el contexto de la reforma laboral es el de un país que tiene el salario mínimo vital y móvil más bajo de América Latina, con ingresos que disminuyen al ritmo de la precarización laboral y con millones de hogares que hoy o no llegan a fin de mes o se endeudan para poder llegar a fin de mes.
Durante el encuentro también se analizó el escenario político hacia 2026, que requiere mayores niveles de unidad política para convocar a los millones de argentinos y argentinas que no participaron en las últimas elecciones y abordar el creciente descontento social frente al gobierno de Javier Milei, a través de la construcción de alternativas confiables, con el pueblo como protagonista central.
En este sentido, ambas CTA asumen la responsabilidad y el compromiso de construir propuestas que amplíen y fortalezcan la unidad del campo popular.
Finalmente, las centrales reafirman la decisión de continuar con el plan de acción y la movilización para enfrentar la reforma laboral y para defender los derechos conquistados por la clase trabajadora.
