by Strauss-Peyton Studio, bromide print, circa 1920
En un humilde barrio de Londres, un 16 de abril de 1889, nació Charles Spencer Chaplin, quien se convertiría en uno de los íconos más grandes del cine mundial.
Hijo de actores de music hall, su infancia estuvo marcada por la pobreza y la desestructuración familiar: su padre alcohólico abandonó el hogar y su madre, con problemas de salud mental, no pudo sostener a sus hijos, lo que llevó a Chaplin a vivir en un asilo durante su niñez.
A pesar de estas adversidades, Chaplin desarrolló un talento innato para la actuación y la comedia. Su personaje más famoso, Charlot, el vagabundo de modales refinados con bombín, bastón y pantalones bombachos, nació de una improvisación y se convirtió en un símbolo universal del cine mudo, capaz de conmover y hacer reír sin necesidad de palabras.
Chaplin inició su carrera en el teatro de variedades y pantomima, y en 1913 comenzó a trabajar en la industria cinematográfica estadounidense, donde rápidamente se destacó. Fue actor, director, guionista, productor y compositor, y cofundó la productora United Artists. Su obra trascendió el tiempo y las fronteras, dejando un legado imborrable en la historia del séptimo arte.
Su vida estuvo marcada por éxitos y controversias, pero su genialidad artística y su humanidad quedaron para siempre en la memoria colectiva. Chaplin falleció en 1977, pero Charlot sigue vivo en la cultura popular como un símbolo de la lucha y la esperanza de los más vulnerables.