MOVILIZACIONES POPULARES EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES CONTRA EL FALLO JUDICIAL QUE CONDENA A CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER
En distintas localidades de la provincia de Buenos Aires, en la tarde de este martes 10 de junio de 2025, se están llevando a cabo cortes de ruta y manifestaciones populares en rechazo al fallo de la Corte Suprema de Justicia que confirmó la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra Cristina Fernández de Kirchner, presidenta del Partido Justicialista y exmandataria nacional.
Las protestas se concentran en puntos estratégicos de la zona norte bonaerense, incluyendo la ruta 8, la Panamericana y la entrada a Pilar por la calle Guido, así como en el Cruce Varela. Estas movilizaciones son una expresión de repudio hacia lo que los manifestantes califican como un fallo judicial alineado con intereses del poder económico concentrado y una ofensiva política contra la principal dirigente opositora del país.
La Corriente Clasista y Combativa (CCC) ha expresado su firme rechazo a la decisión judicial y ha manifestado su acompañamiento a las movilizaciones populares que se están desarrollando en la provincia. Desde esta organización sostienen que la condena representa un ataque a la democracia y a la independencia del poder judicial, y llaman a mantener la unidad y la resistencia frente a lo que consideran una persecución política.
En la ciudad de Buenos Aires, la militancia kirchnerista se ha concentrado en la sede del Partido Justicialista, en la calle Matheu, donde se vive un clima de vigilia y tensión, con cantos y mensajes que prometen resistencia ante una posible detención de la ex presidenta. Figuras políticas cercanas a Cristina Kirchner, como la intendenta de Quilmes Mayra Mendoza, el senador Oscar Parrilli y el ex ministro Eduardo «Wado» De Pedro, han estado presentes apoyando a la líder del espacio político.
El fallo de la Corte Suprema, que ratifica la condena por administración fraudulenta en la causa Vialidad, ha generado un escenario de alta tensión política y social en Argentina. El kirchnerismo interpreta esta decisión como un intento de proscripción política que podría afectar el futuro electoral y la estabilidad democrática del país.
Las movilizaciones en la provincia de Buenos Aires y en otras regiones del país se suman a un clima de creciente polarización y resistencia popular, con organizaciones sociales, sindicales y políticas que llaman a defender la democracia y a rechazar lo que consideran una injusticia judicial.
Con NA.
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