«MILEI SACÓ DE LA POBREZA A LOS MISMOS QUE ÉL HABÍA EMPOBRECIDO» POR CLAUDIO LOZANO

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Nadie en su sano juicio puede transformar este descenso en el indicador de pobreza por ingresos en una suerte de demostración de que las condiciones de vida de la mayor parte de la sociedad argentina han mejorado.

Eso no es así por varias razones. En primer lugar, porque siempre que se produce un shock inflacionario de carácter regresivo, como el ocurrido a partir de la maxi devaluación del 118% practicada en el comienzo de su gestión por Javier Milei, la suba de precios es tan relevante que termina impactando y produciendo un pico elevadísimo de la pobreza por ingresos. Y siempre que pasa esto, luego, en el momento en que se lleva adelante algún tipo de política antiinflacionaria, ante la desaceleración en la evolución de los precios, lo que baja, es el índice de pobreza. Esto ocurrió siempre, no es la primera vez que ocurre.

En este sentido, se puede decir, que Milei sacó de la pobreza a los mismos que él había empobrecido. Pero además debe quedar claro que en el momento en que un hogar es sumergido en la situación de pobreza como resultado de ese shock inflacionario, inmediatamente ese hogar trata de defender y satisfacer sus necesidades recurriendo, o bien, al gasto de sus ahorros, o bien al endeudamiento. Y consecuentemente, luego, cuando se desacelera la evolución de los precios, y mejora en términos relativos la situación y ese hogar ya no está tan sumergido, ocurre que tiene una serie de compromisos de gasto adicionales para devolver los créditos o los préstamos que recibió, que hacen que su ingreso disponible termine siendo inferior en el nuevo marco de desaceleración de precios en el que se encuentra.

Otro elemento absolutamente sustancial para romper cualquier idea de que este indicador al descender implica que las condiciones de vida han mejorado, es entender que ningún indicador indica por sí solo. Tiene que ser inscripto en el contexto general en el que se encuentra, tomando en cuenta todos aquellos indicadores que refieren al momento particular que está viviendo la sociedad argentina. Y en este sentido, hay que evaluar este índice de pobreza por ingresos en el contexto de la caída general de los salarios en términos reales respecto a las condiciones que estos tenían en el 3er. trimestre del 2023, del cierre de 16.800 empresas, del industricidio que indica la destrucción de 1640 industrias en los últimos meses, de la destrucción de más de 200.000 puestos de trabajo formales y del crecimiento de la precarización laboral, de la caída del consumo y del recorte general de la casi totalidad de los programas sociales.

En ese contexto es donde decimos, que más allá del descenso del indicador de pobreza por ingresos, las condiciones de vida de la sociedad argentina evidencian un mayor deterioro respecto al momento en el que comienza la gestión de Javier Milei.

Más allá de esto, existen además, elementos de carácter metodológico y decisiones al interior del INDEC de posponer la actualización de la encuesta de gasto de los hogares para medir de manera más efectiva el índice de precios al consumidor y valorizar adecuadamente la canasta de pobreza, que también plantean dudas respecto al dato que hoy tenemos en materia de pobreza por ingresos.

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📊NUEVO Informe IPYPP

Luces y sombras de la medición de pobreza al 1er semestre 2025
🔴 En la primera mitad de este año, la pobreza alcanzó al 31,6% (15 millones de personas) y la indigencia al 6,9% (3,3 millones), niveles similares a los de 2018. La baja respecto a igual período de 2024 se explica por el pico de la devaluación, pero frente a 2022-23 la mejora es más acotada.
🔴 El descenso debe leerse con cautela por factores metodológicos: la mejora en los ingresos relevados por la EPH no muestra correlato con otras fuentes y la canasta utilizada para calcular la pobreza se encuentra desactualizada.
🔴 En paralelo, las condiciones laborales empeoraron y el consumo masivo se desplomó (supermercados –9,3% y mayoristas –21,8% vs. 2023), creció el uso de tarjetas de crédito para alimentos y los hogares dependen más de ahorros y endeudamiento.
🔴 El ajuste fiscal profundizó las privaciones: entre 2023 y 2025 el gasto social cayó 20%, con recortes drásticos en vivienda (–98,5%), comedores (–74%), educación (–46%) y provisión de medicamentos, entre otros.

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