A horas para la convocatoria a la marcha en defensa de los jubilados de este miércoles, el Ministerio de Seguridad, que comanda Patricia Bullrich, emitió mensajes intimidatorios en distintas estaciones de trenes de la provincia de Buenos Aires hacia los manifestantes, con el fin de amedrentar y disminuir la cantidad de asistentes en la plaza del Congreso. En las redes los usuarios denunciaron que los agentes de Seguridad realizan cacheos al azar y solicitan a los pasajeros que presenten el DNIsin motivo alguno

El Gobierno, en la mira de todos tras la brutal represión de la semana pasada, por la que se hirió de gravedad al fotógrafo Pablo Grillo, utilizó esta mañana de miércoles el sistema de comunicación de las estaciones de trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para enviar un mensaje disuasivo: “Protesta no es violenciaLa policía va a reprimir todo atentado contra la República“, indican tanto por altoparlantes como en pantallas.

El comunicado del Gobierno de Milei fue repudiado en las redes sociales. El hashtag “Estado de sitio” se convirtió en tendencia en las últimas horas, con mensajes de usuarios que cuestionan la militarización de la Ciudad de Buenos Aires por un reclamo de aumento de las jubilaciones, siendo que la mínima quedó estancada en los $279.121,71, cuando un jubilado necesita al menos $1.200.523 mensuales para afrontar sus gastos básicos, según datos de la Defensoría de la Tercera Edad.+

Y es que, si bien la convocatoria es a las 17, en la zona ya se anticipa una jornada complicada: habrá un megaoperativo de seguridad y cortes de tránsito en el centro porteño. El tránsito se cortó desde temprano en el perímetro comprendido entre Paraná y su continuación Sáenz Peña, Bartolomé Mitre, Ayacucho y su continuación Sarandí, y Adolfo Alsina. Según informaron las autoridades, habrá 600 agentes de tránsito en las calles y, en total, más de 2.000 efectivosentre policías de la Ciudad y fuerzas federales, en el Congreso y sus alrededores.

Fuentes oficiales revelaron a NA que a los policías de la fuerza porteña se sumarán 720 policías federales y unos 400 entre miembros de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval. El objetivo de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, es complicar la llegada de los manifestantes a la zona.

En este sentido, la Policía Federal realizó operativos y controles en colectivos y formaciones de trenes. Los usuarios denunciaron que en varios casos solicitaron que presentaran el documento nacional de identidad (DNI) y explicaran hacia dónde se dirigían, sin motivos legales que lo justifiquen.

Al respecto de las intimidaciones en las estaciones de trenes, el vocero presidencial, Manuel Adorni, respaldó esta mañana esas amenazas en su cuenta de X, donde afirmó: “Las protestas nunca deben ser violentas. Fin”.

Durante la noche del martes, en una entrevista televisiva, el funcionario reivindicó el accionar policial en la marcha pasada y catalogó como “desgracia” el negligente disparo de un agente de las fuerzas de seguridad contra Grillo.

La herida de Grillo es una desgracia, estamos rezando por que se recupere. Él es víctima de una situación de violencia tremenda”, expresó, apuntando contra los manifestantes.

De cara a la manifestación, Adorni remarcó la postura oficialista de que “el que las hace las paga”, y afirmó: “la calle debe estar en orden, las protestas deben ser dentro de la ley, y no vamos a permitir la violencia. La gente quiere vivir en paz”. En ese sentido, recomendó a “la gente que va a ir a reclamar por lo que considera justo” que “cuando vean violencia” se alejen, porque “las fuerzas de seguridad van a actuar y van a hacer respetar la ley“.

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