En una cadena nacional que generó una marcada polémica política, el presidente Javier Milei confirmó firmemente su postura de vetar tres leyes vitales aprobadas por el Congreso: el aumento para jubilados, la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad.
Argumentó que dichas normas carecen de fuentes claras de financiamiento y que su aplicación agravaría el déficit fiscal, poniendo en riesgo la estabilidad económica del país.
“Cuando la oposición no plantea de dónde se van a sacar los fondos para estas, es irresponsable”, criticó Milei durante su alocución de medidas, en la que detalló que los gastos asociados superarían los 7 billones de pesos para 2025 y los 17 billones para 2026, cifras imposibles de sostener sin un serio impacto negativo en las cuentas públicas.
El presidente también confirmó un proyecto que ya venía implementándose: la prohibición al Tesoro Nacional de prestar dinero al Banco Central (BCRA), una medida clave dentro de su plan para controlar la inflación y lograr un equilibrio fiscal sostenible.
Además, Milei adelantó que enviará al Congreso un proyecto de ley que sancionará a los diputados que propongan iniciativas contrarias a su plan económico de “déficit cero”. Este anuncio pone sobre la mesa un esquema de fuerte predominio del Ejecutivo, sugiriendo que, dadas sus reiteradas posturas de veto, la función legislativa será limitada en la práctica.
“Por más leyes que saquen, las vetaré si aentan contra el plan de orden fiscal que necesitamos”, sentenció Milei, dando a entender que el Congreso nacional perderá relevancia ante el ejercicio sistemático del veto presidencial.
La oposición ya manifestó su rechazo a la postura del Gobierno, defendiendo los aumentos y las medidas sociales que, según ellos, protegen a los sectores vulnerables como jubilados y personas con discapacidad. Sin embargo, Milei se mantiene firme en su estrategia de ajuste y control del gasto público para superar la crisis económica.
La cadena nacional visibiliza un fuerte choque político en el país, con un Ejecutivo que busca imponer a toda costa su esquema económico y un Legislativo que se ve limitado su en su margen de acción.