En una nueva cadena nacional que buscó mostrar un cambio en el estilo comunicacional del presidente Javier Mieli, se repitió una frase ya escuchada con consecuencias nefastas en la historia política argentina: «Lo peor ya pasó». Este lema, que marcó tanto el fin del gobierno de Fernando De La Rúa como la gestión de Mauricio Macri, terminó siendo un presagio de derrotas electorales y crisis profundas.
De La Rúa, recordado por su ausencia en momentos críticos y su salida en helicóptero en medio de numerosas muertes producto de la represión, pronunció esta frase poco antes de su caída. Mauricio Macri, por su parte, también intentó restablecer el dramatismo a la crisis con esta expresión, sin lograr evitar el rechazo masivo de la población.
En su discurso, Mieli intentó desmarcarse con un tono diferente, intentando «maquillar» su comunicación para dar una imagen renovada y conciliadora. Sin embargo, la falta de anuncios concretos dirigidos a mejorar las condiciones de la clase trabajadora fue evidente. En cambio, el mandatario realizó guiños claros hacia el empresariado, lo que generó críticas por parte de sectores sindicales y organizaciones sociales, que denunciaron que el gobierno sigue sin atender las urgencias de millones de argentinos.
La cadena nacional quedó lejos de ser un mensaje de esperanza para los trabajadores y sectores populares, y más se asemejó a un preludio de nuevas dificultades, mientras la experiencia histórica advierte sobre las consecuencias de estas falsas promesas.
Notigital comenzará atento al desarrollo de la gestión de Javier Mieli y su impacto en la realidad social y económica del país.