Bullrich recordó este miércoles que el artículo 333 establece que las manifestaciones deberán ser notificadas al Ministerio de Seguridad con antelación, para que la cartera “pueda organizarla de la mejor manera posible”.

En caso de que las manifestaciones “sean grandes”, aclaró, “las vamos a encauzar igual por la vereda, pero en algunos casos puede haber algún tipo de corte”. Ante ese escenario, siguió, “vamos a tratar de plantear lugares en los que no haya ningún tipo de corte, porque el objetivo es que no se corten nunca más las calles y se pueda vivir en paz y tranquilidad”.

Luego explicó que ante manifestaciones espontáneas se aplicará “el mismo protocolo y misma ley”. Y ejemplificó: “Algo que es bastante típico es cortar el tren para quejarse porque no hay luz: es pésimo no tener luz, pero también es pésimo que haya personas que no pueden volver a sus casas. Entonces ahí la decisión de sacar a las personas de esa obstaculización que pueda haber en una vía va a ser lo más rápido posible y coordinada con los distritos de todo el país”, prometió.

BULLRICH CONTRA LOS PIQUETES

Bullrich comenzó a explicar las modificaciones en seguridad que incluye la Ley Ómnibus, entre ellas el endurecimiento de penas contra manifestantes al punto de volverlas no excarcelables, y argumentó que estos cambios “tienen una connotación de la urgencia con la que el país precisa tomar decisiones para poder salir de la crisis económica en la que está y no hundirse más”.

“El peligro que vemos todos los días es que cualquier dilación o error que pueda surgir en las decisiones estratégicas de cambio que se están tomando puedan generar una sensación de incertidumbre que lleve a que los distintos actores se muevan de tal manera que el país pueda entrar en una situación gravísima económica“, abundó.

Luego, aseguró en base a una estadística privada, que “el país ha tenido desde el año 2009 una estadística privada 85.200 piquetes y manifestaciones”, lo que implicó “una pérdida de comercios, de horas de trabajo, de posibilidades de las personas de llegar a sus lugares de trabajo y una discriminación por dónde vive la gente”, aseguró.

Acto seguido, realizó una descripción de las penas que tendrán los manifestantes, en especial quienes organicen el corte o piquete, y mencionó las denuncias que el Gobierno recibió en las últimas semanas a través de la línea 134.