Emiliano Martínez entró de la mano de su hijo al Villa Park antes de la victoria 3-1 frente a Fulham y fue protagonista de un mega recibimiento en su primer partido como local luego de recibir el premio Lev Yashin al mejor arquero del mundo.
En su vuelta a Birmingham y justo antes de viajar para los enfrentamientos de la Selección Argentina vs. Uruguay y Brasil, Dibu ofreció el galardón ante todo su público, que lo reconoció con una gran bandera con la leyenda “el mejor del mundo” y la típica ovación coreando su nombre.
Luego, su Aston Villa venció cómodamente al conjunto londinense con los tantos de Antonee Robinson, en contra, John McGinn y Ollie Watkins, mientras que el mexicano Raúl Jiménez marcó el descuento después de 612 días sin convertir en la Premier League. Con esta victoria, los de Unai Emery se ubican en el 5° puesto con 25 puntos, a 1 de Tottenham, su próximo rival, y a 2 de Liverpool y Arsenal.
Dibu festejó de esta manera el segundo gol de su equipo, el del capitán, para acompañar al hijo del escocés, quien debe utilizar anteojos para jugar al fútbol por problemas de visión y siempre es recordado así en las celebraciones de su padre.