Cecilia Pando, referente de los grupos que reclaman la liberación de los represores condenados por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar, renovó sus críticas al Gobierno de Javier Milei este jueves. En un mensaje difundido en redes sociales y durante una concentración frente a la Casa Rosada, Pando exigió «justicia verdadera» y acusó al Ejecutivo de «traicionar» a los militares que, según ella, «defendieron la patria» en los años 70.
La activista, conocida por liderar marchas anuales en el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas frente a la ESMA, apuntó directamente contra el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona. «El Gobierno prometió amnistías y libertad para nuestros héroes, pero solo ofrece discursos vacíos mientras los verdaderos criminales –guerrilleros y terroristas– gozan de impunidad», declaró Pando en un video que ya suma miles de reproducciones en X (ex Twitter). Su reclamo se enmarca en una serie de fallos judiciales recientes que han denegado la libertad condicional a excomandantes como Luciano Benjamín Menéndez y otros procesados por el Plan Cóndor y secuestros en la dictadura.
Pando no es nueva en estas batallas. Hija de un exmilitar, ha encabezado protestas desde hace dos décadas, cuestionando los juicios por delitos de lesa humanidad y defendiendo la teoría de las «dos demonías». En esta oportunidad, coincidió con el aniversario de la Navidad de 1977, cuando miles de desaparecidos fueron vistos por última vez en centros clandestinos, un hecho que ella reinterpretó como «propaganda montada por el kirchnerismo». La manifestación reunió a unas 200 personas, incluyendo familiares de represores y simpatizantes libertarios, bajo el lema «Libertad o muerte para los patriotas».
Desde el Gobierno, fuentes de Justicia minimizaron el episodio, recordando que las decisiones sobre condenas recaen en los tribunales independientes. Sin embargo, el reclamo de Pando genera tensiones en un contexto de polarización: mientras organizaciones de derechos humanos como Abuelas de Plaza de Mayo y CELS repudiaron sus dichos –calificándolos de «negacionismo descarado»–, sectores oficialistas como La Libertad Avanza ven en ella un símbolo de «memoria completa».
El episodio reaviva el debate sobre la memoria histórica en Argentina, en medio de un 2025 marcado por reformas judiciales impulsadas por Milei. ¿Cumplirá el Gobierno con las expectativas de estos grupos o priorizará el consenso internacional sobre derechos humanos? El tiempo –y las próximas marchas– lo dirán.