Las centrales obreras CTA de los Trabajadores y CTA Autónoma lanzaron un durísimo rechazo al proyecto de «Modernización Laboral» impulsado por el gobierno de Javier Milei, al que tildaron de «regresivo» y comparable al «mayor ataque contra los derechos laborales desde la última dictadura». En un comunicado conjunto, declararon el estado de alerta y movilización permanente y convocaron a una protesta masiva hoy en la Plaza de Mayo y plazas del interior del país.

El documento, firmado por los secretarios generales Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores) y Hugo Godoy (CTA Autónoma), denuncia que la iniciativa no moderniza el trabajo, sino que «retrotrae al siglo XIX» al restaurar «sin límites el poder patronal» sobre jornadas, descansos y salarios. Entre los puntos más críticos figuran la «prohibición de hecho del derecho a huelga» y el «saqueo de fondos de seguridad social» destinados a jubilados, pensionados y asignaciones familiares.

Un ataque frontal a trabajadores y sindicatos

Las CTA alertan que la reforma precariza las relaciones laborales, debilita a los sindicatos y atenta contra la Justicia Nacional del Trabajo. «Se trata de una embestida pro-patronal dirigida contra las y los trabajadores, sus organizaciones sindicales, el sistema de Seguridad social y la propia Justicia», reza el texto. Critica que el gobierno busca reemplazar el «Estado Social de Derecho» por un «Estado gendarme al servicio de los compañeros», con ajustes que golpean a jubilados, personas con discapacidad, salud, educación y ciencia.

Para las centrales, la verdadera modernización implica «reducir la jornada laboral, garantizar empleo digno y permitir que los trabajadores participen de las ganancias», no «quitar derechos, precarizar y disciplinar».

Contexto de la crisis laboral bajo Milei

El comunicado vincula la reforma a los efectos de la política económica de los últimos dos años: mayor endeudamiento, precarización, informalidad, pérdida de 285.000 puestos de trabajo registrados y cierre de 20.000 empresas . La movilización de hoy busca no solo frenar el proyecto, sino exigir un «cambio urgente» en la política económica y de empleo.

Hugo Yasky y Hugo Godoy concluyen: «Convocamos a movilizar el próximo 18 de diciembre a Plaza de Mayo ya todas las plazas del país, para decir NO a este nuevo ataque contra los derechos de las y los trabajadores».

La protesta se enmarca en un clima de tensión creciente por la aprobación exprés que busca el oficialismo en el Congreso, en medio de reclamos sindicales que escalan ante la inflación y la caída del poder adquisitivo.

 

Con NA.

Sobre Nosotros

Por Claudio Gambale

Claudio Gambale 47 años , Periodista de Tres de Febrero.