Julio María Sosa Venturini, conocido como Julio Sosa y apodado «El Varón del Tango», nació el 2 de febrero de 1926 en Las Piedras, Uruguay, y falleció trágicamente el 26 de noviembre de 1964 en Buenos Aires.
Fue uno de los cantantes y compositores de tango más emblemáticos de la década de 1950 y 1960, reconocido por su voz poderosa y su presencia carismática que lo convirtió en un icono del tango rioplatense. Su trayectoria musical comenzó en Uruguay, cantando con varias orquestas y ganando reconocimiento que lo llevó a trasladarse a Buenos Aires, epicentro del tango, donde alcanzó la cima de su fama.
Sosa era conocido por su estilo apasionado e intenso, que le valió el título de «El Varón del Tango». Su carrera abarcó numerosas discotecas y presentaciones, en las que combinaba voz y sentimiento de manera magistral. Además, mostró dotes actorales que también explotaron en el cine, participando en películas como «Buenas noches, Buenos Aires». Su influencia no solo se limitó a la música, sino que también incursionó en la poesía y la composición de letras para tangos.
El 26 de noviembre de 1964, Julio Sosa murió en un accidente automovilístico en Buenos Aires mientras conducía a alta velocidad, una pasión que lo había puesto en riesgo en varias ocasiones previas. Su muerte provocó una gran conmoción, reflejada en el velatorio masivo en el Luna Park de Buenos Aires. Su legado musical permanece vigente y su figura es recordada con profundo respeto y admiración en Uruguay, Argentina y toda América Latina. Sus restos descansan en su ciudad natal, Las Piedras, Uruguay, donde se continúa honrando su memoria como un verdadero símbolo del tango.
Este 26 de noviembre se conmemora la partida de un cantor que marcó una época, dejando una huella imborrable en la cultura musical rioplatense y mundial, con clásicos que siguen siendo interpretados y admirados por nuevas generaciones.
Con NA.
