JUAN GRABOIS DENUNCIA PROPAGANDA POLÍTICO-PARTIDARIA EN EVENTO DEL OBISPADO CASTRENSE Y CRITICA LA SITUACIÓN DE POLICÍAS Y MILITARES
Juan Grabois criticó duramente la organización y difusión del evento del Obispado Castrense, señalándolo como una actividad de propaganda político-partidaria que incluye imágenes de políticos oficialistas como si fuera un afiche de campaña.
Resaltó que, independientemente de quiénes sean los homenajeados, esta forma de utilización es incorrecta, especialmente porque esos funcionarios pertenecen a un partido cuyo presidente considera la «justicia social» como un pecado capital en la doctrina social de la iglesia.
Además, Grabois expresó su preocupación por las condiciones laborales precarias de policías y militares, quienes cobran salarios bajos (alrededor de $700.000), trabajan en condiciones intolerables, complementan sus ingresos con trabajos informales como Uber y se ven obligados a reprimir a jubilados, niñas, periodistas, personas con discapacidad y hasta curas. Preguntó en qué lugar quedarán estas personas y mencionó especialmente a Pablo Grillo, poniendo en cuestión quiénes realmente están haciendo justicia.
El dirigente también denunció la situación de soldados que no cobran sus salarios en tiempo y forma, sufren vejaciones y que la obra social está al borde de la quiebra debido a malas gestiones y estafas, dejando desamparados a los efectivos y sus familias. Recordó que muchos obispos, sacerdotes y fieles comparten el sentimiento crítico hacia una iglesia que debería alejarse del poder y acercarse a la gente, siguiendo el camino indicado por el papa Francisco, que reivindica a los humildes y señala las injusticias.
Esta fuerte declaración de Grabois evidencia la profunda disconformidad con el uso político del acto y plantea un enfoque social crítico sobre la realidad de las fuerzas de seguridad, lo que genera un debate necesario sobre las verdaderas condiciones y reconocimientos hacia quienes cumplen funciones esenciales en la justicia social y la seguridad del país.
