El 14 de noviembre de 1909 marca un hecho histórico en la Argentina con el asesinato del militar y policía Ramón Falcón.
Falcón fue una figura controvertida, conocido por su represión dura contra movimientos obreros y sociales, especialmente durante una época de grandes conflictos laborales. Fue asesinado por el activista anarquista Simón Radowitzky, en un acto simbólico que reflejaba la tensión entre el Estado y los sectores populares en lucha por derechos laborales y justicia social.
Este acontecimiento es recordado como un punto de inflexión en la historia del movimiento obrero argentino y la respuesta estatal a las demandas sociales.