Ayer llegó a la Comisión de Familiares de Detenidos y Desaparecidos de Tres de Febrero una lamentable noticia: parte del mural realizado en 2023 en el Barrio Evita de Caseros, en homenaje a la memoria de las víctimas de la dictadura, fue dañado parcialmente.
El mural está ubicado a pocos metros del lugar donde la compañera Alicia Amaya fue secuestrada el 3 de junio de 1978. Además, el sitio funcionó como lugar de votación de la actual vicepresidenta Victoria Villarruel, lo que añade una fuerte carga simbólica a este espacio.
Según denuncian desde la Comisión, el daño habría sido ocasionado por personal municipal en el marco de una obra de recuperación del predio que se encuentra justo detrás del mural. Desde la organización calificaron este accionar como «inentendible» y lamentaron que «poco sorprende ya» este tipo de situaciones, producto del poco reconocimiento hacia la memoria histórica.
A pesar de este daño, la Comisión reafirma su compromiso: «Seguiremos construyendo memoria desde abajo», para mantener viva la historia y la memoria de aquellos que lucharon y fueron desaparecidos en tiempos de dictadura.