LAS CONTRADICCIONES DE DIEGO VALENZUELA: DE DEFENSOR DE FICHA LIMPIA AL SILENCIO ALIADO DE LA LIBERTAD AVANZA
En 2022, Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero, se erigía como un férreo defensor de la transparencia y la ética en la política local.
En ese entonces, presentó ante el Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para implementar la Ficha Limpia, una iniciativa clara y contundente: impedir que quienes estuvieran condenados por delitos contra la administración pública pudieran ejercer cargos en el Ejecutivo municipal. Su discurso era firme y comprometido, afirmando que “queremos ser pioneros porque es fundamental que nuestra democracia sea transparente”.
Este compromiso público con la lucha contra la corrupción y la defensa de la integridad política contrastaba con el contexto nacional, donde figuras como Silvia Lospenato y Cristian Ritondo impulsaban medidas similares desde la Coalición Cívica y otros espacios opositores. Valenzuela no solo apoyaba la iniciativa, sino que la hacía su bandera local, posicionándose como un intendente que apostaba por la renovación ética y la responsabilidad institucional.
Sin embargo, tres años después, la realidad es otra. Tras su pase consumado a La Libertad Avanza, un espacio político con posturas y alianzas muy distintas a las que representaba en 2022, Valenzuela ha guardado un silencio absoluto sobre el tema de la Ficha Limpia. No solo dejó de opinar, sino que parece haber olvidado por completo el proyecto que en su momento defendió con tanto énfasis.
Este cambio no es menor. Refleja una contradicción profunda entre lo que Valenzuela prometió y lo que finalmente practica. ¿Es posible que la ética y la transparencia sean valores negociables según el contexto político? ¿O acaso la Ficha Limpia fue solo un discurso funcional para ganar apoyo en un momento determinado?
Los vecinos de Tres de Febrero merecen respuestas claras y coherentes. La política no puede ser un juego de máscaras donde se defiende un valor cuando conviene y se ignora cuando no. La credibilidad de un intendente se construye con acciones consistentes, no con silencios oportunistas.
En definitiva, Diego Valenzuela tiene una deuda pendiente con su electorado: explicar por qué abandonó una bandera que en 2022 consideraba fundamental para la democracia local. Solo así podrá recuperar la confianza y demostrar que la transparencia no es un slogan vacío, sino un compromiso real y permanente.
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