Ocurrió ayer por la tarde, pasadas las 16:00 h, cuando un camión con semirremolque que intentaba ingresar por el Metrobus R8 (RP8) al Camino del Buen Ayre, en sentido a la Autopista Acceso Oeste, colisionó contra el guardarraíl que se encuentra en la isla que separa los carriles de circulación inversa provocando que la cabina y remolque se plegaron en forma de navaja. Un accidente de navaja ocurre cuando el semirremolque y la cabina se pliegan en forma de V.
Tras el accidente, que de milagro no dejó heridos, el camión Iveco quedó sobre la mano contraria provocando un caos vehicular.
Un móvil del Comando de Patrullas de Tres de Febrero llegó al lugar en prevención, y más tarde arribó personal de Seguridad Vial del Camino del Buen Ayre que solicitó la grúa para vehículos pesados para retirar el camión.
Personal de Seguridad Vial del Camino del Buen Ayre deriva el tráfico por uno de los carriles de circulacion inversa. Foto. Edgardo Onischuk para miperiodico
Según fuentes del caso que hablaron bajo condición de anonimato, y según las primeras informaciones, el camión circulaba por el Metrobus en sentido a la Guarnición Militar de Campo de Mayo, cuando luego de sobrepasar el puente del Buen Ayre intentó girar a la izquierda para incorporarse al camino en sentido a la Autopista Acceso Oeste, pero un motociclista se cruzó de manera repentina y obligó al chofer del camión a frenar bruscamente sobre el pavimento mojado por la lluvia para evitar la colisión.
El motociclista salió ileso y siguió viaje.
Sin embargo, esa maniobra provocó que el caminó saliera hacia adelante fuera de control, y luego de chocar contra uno de los extremos del guardarraíl de la isla que separa los carriles de circulación inversa, que carece de dispositivo antiempotramiento, se plegó en forma de V y se detuvo. Generando un accidente de navaja en donde de milagro no hubo heridos ni otros vehículos involucrados.
A raíz del incidente personal de Seguridad Vial del Camino del Buen Ayre utilizó conos de tránsito para encarrilar y canalizar el tráfico con el objetivo de guiar de forma segura a los conductores a través de una derivación hacia uno de los carriles contrarios que quedó reducido y habilitado transitoriamente para circular.