EL DÍA QUE RIVER PLATE ROMPIÓ LA SEQUÍA DE TÍTULOS TRAS 18 AÑOS

Foto El Gráfico

El año 1975 marcó un hito en la historia de River Plate. Tras 18 años de sequía, la banda roja volvió a gritar campeón en el fútbol argentino, conquistando el Metropolitano y dando inicio a una nueva era dorada para el club.

La espera por un título se había hecho interminable. La última conquista había sido en 1957, un tiempo en el que River, a pesar de su rica tradición, no lograba encontrar el camino al éxito. La llegada de Ángel Labruna como entrenador, una figura emblemática para el club, significó un cambio de rumbo.

El “Flaco” Labruna, con su experiencia como jugador y su conocimiento del club, supo ensamblar un equipo que combinaba la experiencia de jugadores como Alfredo Rojas y Oscar Ortiz con la frescura de jóvenes talentos como Daniel Onega, Leopoldo Luque y Norberto Alonso.

El equipo de River, con un fútbol vistoso y efectivo, se convirtió en protagonista del Metropolitano. La rivalidad con Boca Juniors, que venía de ganar el torneo anterior, le dio un marco especial a la competencia.

La victoria en la última fecha, 3-1 ante Huracán en el Monumental, con goles de Onega, Luque y Alonso, desató la euforia en las calles de Buenos Aires. El estadio vibró con la alegría de los hinchas millonarios, que por fin veían a su equipo volver a la cima.

Este campeonato no solo significó un festejo para los fanáticos, sino que también marcó un punto de inflexión en la historia del club. La llegada de jugadores como Alonso, Luque y el propio Onega, junto a la experiencia de jugadores como Rojas y Ortiz, sentó las bases para una nueva era dorada en la historia de River Plate.

El título de 1975 no solo fue un triunfo deportivo, sino que también representó la resurrección de una leyenda. River Plate, con su fútbol y su pasión, volvió a ocupar el lugar que le correspondía en el fútbol argentino, dando inicio a una nueva etapa llena de éxitos y gloria.

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