La remoción de Adrián Luque, que hasta el viernes pasado ocupaba la presidencia de Sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (SOFSE), es leída en San Miguel, la patria chica del ahora ex funcionario, como señal de un reacomodamiento interno en las filas libertarias.
Los Romo, Agustín, diputado nacional, y su padre Carlos, quien es concejal en es municipio, pierden con la salida de Luque a un actor importante de su armado económico. De acuerdo al anuncio oficial de la empresa a los medios, “no se cumplieron los objetivos y tiempos adecuados para las reformas que demanda el sector” y el reemplazante de Luque será una persona del área, “100% técnico, que podrá trabajar en la ‘emergencia ferroviaria’ aportando su expertise y conocimiento”. Estos duros términos, algo habitual cuando esta gestión despide funcionarios, tienen en este caso razones políticas de fondo que involucran tanto al asesor presidencial Santiago Caputo como al ex jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Luque, un abogado que en la etapa anterior había tenido a su cargo parte del área legal de la empresa, fue quien advirtió sobre los efectos devastadores del ajuste sobre el sector, poco antes del choque entre formaciones que tuvo lugar en la estación Palermo de la línea San Martín, el pasado mes de pasado.