El Nápoles quería seguir descontando hojas al calendario en su afán por intentar ganar al fin el Scudetto tras tres décadas. Hoy recibían los de Luciano Spalletti a un viejo conocido: Maurizio Sarri al frente de la Lazio.
Un encuentro donde los partenopeos esperaban no fallar pero a la vez guardar fuerzas porque sus frentes se multiplican y también pelean por la Liga de Campeones.
Tras una primera parte sin goles, Matías Vecino abriría el marcador en el 67′ para el club biancocelesti. Un gol que avanzaba a los visitantes, y que obligaba a los del sur de Italia a remar contracorriente, en una situación que pocas veces vivieron esta temporada.
Un gol que los líderes no lograban igualar, de manera que cosechan una inesperada derrota en casa que puede generar algunas dudas en un momento clave del curso. Si bien mantienen todavía una gran ventaja sobre sus competidores.