El 29 de mayo de 1969 estalló en Córdoba, Argentina, el Cordobazo, un movimiento de protesta masivo protagonizado por obreros y estudiantes en rechazo al régimen dictatorial de Juan Carlos Onganía.
Esta rebelión popular fue una respuesta a las duras políticas económicas y sociales impuestas por el gobierno de facto, y marcó un punto de inflexión en la lucha por los derechos laborales y la democracia en el país. La movilización fue reprimida con violencia, pero su impacto político y social fue profundo, inspirando futuras resistencias y la eventual caída del régimen.
El Cordobazo es recordado como un símbolo de la resistencia popular y la unidad entre trabajadores y jóvenes frente a la opresión.