A través de datos brindados por la Superintendencia de Riesgos de Trabajo, la organización sobre prevención al volante determinó que los accidentes más comunes a la hora de ir o volver de la jornada laboral son causados por exceso de velocidad o velocidad no adaptada al estado del camino o clima, conducir bajo los efectos del alcohol o drogas, no usar casco o cinturón de seguridad, utilizar el celular, no guardar distancia entre vehículos o conducir con fallas técnicas o de mantenimiento.

“El Gobierno, debe proporcionar la infraestructura (leyes y servicios) para garantizar la seguridad de los trabajadores. Esto incluye el desarrollo de una política y un programa nacional y un sistema de inspección para hacer cumplir la legislación y políticas de seguridad y salud”, aseguraron desde el organismo no gubernamental.

Sin embargo, también hizo responsables de garantizar la seguridad tanto a los empleadores, que deben encargarse de que “el entorno de trabajo sea seguro y saludable” brindando medidas de seguridad dentro de la empresa y movilidad para ir y volver de ella, como a los empleados, que “tienen la responsabilidad de trabajar de manera segura para protegerse a sí mismos y para no poner en peligro a los demás”.