El 8 de abril de 1994, Cobain fue encontrado muerto en su casa en Seattle, a causa de una herida ocasionada en la cabeza por una escopeta alrededor de tres días antes.
Las circunstancias de su muerte, a los 27 años de edad, se han convertido en un tema de fascinación pública y debate.
Durante toda su vida libró una lucha contra la depresión, que comenzó a los nueve años con el divorcio de sus padres. También padeció bronquitis, laringitis y dolores de estómago crónicos, sumados a la adicción a las drogas y al alcohol.
Proclamado como el líder de una generación, la X, nunca se sintió cómodo con ese papel. De hecho, llegó a albergar resentimiento contra las personas que decían ser fanáticos de la banda pero se negaban a reconocer o malinterpretaban las opiniones sociales y políticas de la banda. Opositor declarado del sexismo, la agresión sexual, el racismo y la homofobia.
Su controvertido estilo de vida, su carisma, su increíble talento y su muerte prematura lo han convertido en una leyenda y una de las figuras más influyentes del siglo XX y de la historia de la música. Cambió las convenciones del rock y es el mayor referente de la música «grunge».