El 2 de junio de 1882 falleció Giuseppe Garibaldi, uno de los líderes más emblemáticos del proceso de unificación de Italia. Nacido en 1807 en Niza, Garibaldi fue un militar y revolucionario que luchó por la independencia y la unidad de su país, así como por ideales republicanos y democráticos.
Su valentía y carisma lo convirtieron en un símbolo de la lucha contra la opresión y el imperialismo. Lideró la famosa Expedición de los Mil en 1860, que permitió la incorporación de Sicilia y Nápoles al Reino de Italia. Garibaldi también participó en movimientos revolucionarios en América del Sur y defendió causas liberales en Europa.
Su legado perdura como ejemplo de compromiso y sacrificio por la libertad y la justicia social.