Un 28 de febrero de 2013 se hace efectiva la renuncia del papa Benedicto XVI (Joseph Ratzinger).
Al pontificado, con lo que el religioso alemán se convirtió en el primer obispo de Roma que renuncia en 598 años. El último en dimitir había sido Gregorio XII, en 1415. En marzo de 2013, en la quinta votación del cónclave en Ciudad del Vaticano, el cardenal argentino Jorge Bergoglio sería elegido papa con el nombre de Francisco.